12.12.2025 06:56 a.m.
Redacción: Juan Pablo Garzón Vásquez
La Feria Taurina 71 de Manizales prepara una noche histórica: el 9 de enero la Plaza de Toros La Macarena será escenario del Festival Benéfico en favor del Hospital Infantil Rafael Henao, con la reaparición del Maestro César Rincón, acompañado de Roca Rey y Alejandro Talavante, y toros de Juan Bernardo Caicedo y Ernesto Gutiérrez. Una cita irrepetible que promete estremecer el alma taurina de Colombia.
Lenguazaque – Colombia. Manizales vuelve a encender el alma taurina del país. El próximo 9 de enero, cuando los faroles de La Macarena brillen sobre el albero, la ciudad vivirá uno de esos capítulos que quedan inscritos en la memoria de la afición: la reaparición del Maestro César Rincón, figura máxima del toreo colombiano y referente universal del temple y la entrega. Será el plato fuerte de la Feria Taurina 71, una edición que ya se anuncia como una de las más emocionantes de las últimas décadas.
UNA NOCHE PARA LA HISTORIA
La empresa ha tejido un cartel de campanillas, concebido para tocar las fibras más profundas del aficionado. César Rincón, leyenda viviente, volverá a vestir de luces en su plaza talismán, donde tantas veces selló tardes de oro. A su lado estarán dos colosos de la torería contemporánea: el peruano Andrés Roca Rey, máximo exponente del toreo de poder y conexión con los tendidos, y Alejandro Talavante, torero de inspiración pura, expresión artística y concepto personalísimo.
La conjunción de estas tres figuras no solo es inédita en la historia reciente del coso manizaleño, sino que configura un acontecimiento que trasciende lo taurino y se incrusta en la cultura de la ciudad: un cartel que mezcla maestría, presente y vanguardia en una sola faena colectiva.
UN FESTIVAL CON ALMA Y PROPÓSITO
Este festival extraordinario no solo persigue la grandeza estética del toreo. Tiene un fin noble: la recaudación beneficiará al Hospital Infantil Rafael Henao, conocido con cariño como “el hospitalito” de Manizales, institución que por décadas ha atendido a miles de niños del Eje Cafetero y que agradece, una vez más, el respaldo de la afición taurina.
El evento se convierte así en un puente entre la tradición y la solidaridad: el arte del toreo puesto al servicio de la vida, la salud y la esperanza. Una velada que reafirma la vocación benéfica que siempre ha acompañado a las grandes ferias colombianas.
HIERROS DE CATEGORÍA PARA UN CARTEL DE LUJO
Para una ocasión tan solemne, la materia prima debía estar a la altura. Por ello, las reses provienen de dos casas ganaderas de enorme prestigio: Juan Bernardo Caicedo, estirpe de bravura y calidad, y Miguel Gutiérrez, hierro de encaste firmeza y trapío impecable. Ambas ganaderías han sido pilares fundamentales en la historia de la feria, enviando toros de nota que han permitido tardes memorables.
El equilibrio entre bravura, nobleza y presencia promete embestidas que otorguen lucimiento a los actuantes y emoción al tendido, una combinación que la afición manizaleña sabe apreciar y exigir.
LA MACARENA: TEMPLO VIVO DEL TOREO
La plaza, con su aire de tradición y su acústica única, será testigo del reencuentro de la afición con uno de sus ídolos eternos. La Macarena, escenario de epopeyas de cartel envidiable, volverá a latir con esa identidad que solo ella tiene: el temple en los silencios, la hondura en los olés, el respeto sagrado por el arte de lidiar toros bravos.
“Manizales, donde el ruedo es eterno”, no es un lema: es una verdad grabada en cada feria, en cada paseíllo, en cada instante que el sol o los faroles iluminan el albero.
UNA CITA QUE NADIE QUIERE PERDERSE
La expectativa ya desborda conversaciones, peñas taurinas y tertulias. La boletería, como era de esperarse, avanza a ritmo acelerado, y los organizadores insisten en un mensaje claro: “Asegura tus boletas y no te quedes por fuera de esta noche irrepetible”.
Porque noches así no se repiten. Porque la historia no avisa dos veces. Porque la vuelta a los ruedos del Maestro Rincón, sumada a la presencia de dos figuras mundiales y a una causa benéfica invaluable, convierte este festival en un acontecimiento que ningún aficionado debería perderse.
